Adif prolongará hasta las 12:00 del martes la interrupción de la circulación en varios tramos del Corredor Mediterráneo a su paso por Tarragona y Castellón debido a los daños provocados por la DANA Alice. La medida prioriza la seguridad y da margen para completar reparaciones y verificaciones. Esto sucede mientras la meteorología lo permite.
El gestor ha reforzado sus equipos técnicos y humanos para un seguimiento permanente de la infraestructura. En total, se ha movilizado a un centenar de técnicos y operarios de vía, catenaria y señalización. Están preparados para trabajar de forma continuada y actuar con rapidez en cuanto se abren ventanas de trabajo seguras.
Daños en la infraestructura
Entre Ulldecona y L’Aldea (Tarragona), las inspecciones han detectado inundaciones en ambas vías y arrastres de la capa de balasto. Además, hay otros desperfectos. El arrastre de balasto obliga a aportar nuevo material y a compactarlo para restituir la estabilidad de la vía. Esta es una condición imprescindible para recuperar la velocidad y la seguridad habituales.
Para agilizar estas tareas se ha movilizado un nuevo tren de tolvas de balasto que se suma al que ya trabajaba con 9 tolvas, junto a una perfiladora y dos bateadoras. Esta maquinaria permite distribuir el balasto, perfilar la plataforma y compactar la vía. Estas operaciones se encadenan para dejar el trazado en condiciones de circulación.
En Benicarló (Castellón), la caída de un rayo sobre un edificio técnico de señalización ha provocado daños de diversa importancia en redes e instalaciones de seguridad. Estos daños afectan a los sistemas de control de tráfico. Los equipos están reponiendo tarjetas electrónicas, cableados y conexiones. Estos trabajos son necesarios para restablecer la gestión normal de las circulaciones.
Además, entre Benicarló y Alcalà de Xivert se suspenden temporalmente los trabajos vinculados al cambio de ancho en el Corredor Mediterráneo. El objetivo es liberar recursos y capacidad de la línea. La prioridad es estabilizar la infraestructura y recuperar paulatinamente la circulación antes de retomar estas actuaciones programadas.
Servicios de emergencia activados
Los servicios de emergencia también han intensificado su actividad por los efectos de la lluvia. En las últimas horas, los bomberos de Valencia han atendido diez actuaciones por achiques de agua y caída de árboles, con intervenciones destacadas en Gandia. En la provincia de Castellón se han registrado tres servicios por achiques y la caída de un árbol. También hubo un incendio en una vivienda causado por un rayo en Jérica y Benicarló, según el Centro de Coordinación de Emergencias de la Generalitat.
Las precipitaciones han dejado acumulados significativos. En Castellón, se han recogido 74,2 l/m2 en Artana; 72,8 en Betxí; 43,6 en Costur y 38 en Vila-real. En la provincia de Valencia, los registros son de 34,3 l/m2 en Tavernes de la Valldigna; 28,1 en Barx; 25,8 en La Font d’en Carrós y 20,6 en Llaurí. Estas cantidades explican las inundaciones puntuales y los daños sobre la vía y la señalización.
Adif prevé reabrir la circulación a partir del mediodía del martes si la evolución meteorológica y las reparaciones lo permiten. Hasta entonces, el dispositivo continuará activo para minimizar el impacto en el Corredor Mediterráneo y acortar los plazos de normalización del servicio.
