En una deslumbrante muestra de color, creatividad y espíritu comunitario, el Carnaval de Vinaròs se consolidó una vez más como uno de los eventos más esperados en la Comunidad Valenciana, congregando a cerca de 5.500 entusiastas del carnaval. Este año, la 42ª edición de la festividad transformó las calles de Vinaròs en un escenario vibrante, donde 31 comparsas desfilaron ante miles de espectadores locales y foráneos, algunos de los cuales viajaron especialmente para la ocasión.
A pesar de las adversidades climáticas del sábado, con viento y lluvia intentando apagar el ánimo festivo, el fervor de los asistentes no decayó. La ruta del desfile, que abarcó casi tres kilómetros de recorrido por el corazón de la ciudad, se vio especialmente animada en la avenida de la Libertad. Aquí, el llamado ‘Sambódromo’, equipado con tecnología de sonido y luz de última generación, se convirtió en el epicentro de la fiesta, ofreciendo a los espectadores más de un millar de asientos en gradas para no perderse detalle del espectáculo.
La edición actual superó las expectativas con una participación récord, mostrando alrededor de sesenta carrozas y elementos móviles que fascinaron al público. Las reinas y reyes del carnaval, tanto adultos como infantiles, desplegaron sus trajes espectaculares, resultado de un trabajo creativo y meticuloso que había sido revelado previamente en galas especiales.
Comparsas celebrando aniversarios notables, como ‘Tomba i Tomba’, Penya València, Cherokys, y Uiaaa! Tot dins d’un got i Ja Hi Som, ofrecieron un recorrido nostálgico al incorporar trajes de años anteriores. La precisión de las coreografías de grupos como Locura, Gent en dansa… i avant y Esmuvi, capturó la admiración de los presentes, demostrando el alto nivel de preparación y dedicación de sus integrantes.
El colorido y la alegría inundaron las calles con las comparsas más numerosas, destacando No en Volem Cap, Tot a Orri, Ja Hi Som, y Tot dins d’un Got, que juntas sumaron miles de participantes. La innovación en los disfraces fue notable durante la ‘nit boja’ y otras noches del evento, con temas originales que iban desde homenajes a películas hasta escenas bíblicas recreadas con un toque único.
El domingo, la juventud tomó protagonismo con su vibrante energía, especialmente en comparsas que brillaron no solo por su número sino por la calidad de sus performances. La batucada de Esmuvi, junto a las espectaculares presentaciones de Locura y Gent en dansa… i avant, subrayaron la diversidad y riqueza cultural del carnaval.
