La lucha contra la sumisión química en eventos festivos gana terreno en la provincia de Castellón. Especialmente durante fiestas y grandes concentraciones. Ahora es Vila-real el municipio que se une a la iniciativa de otros pioneros como Almassora o Les Alqueries. Se trata de implementar el reparto de pulseras Centinela durante las celebraciones, esta vez en de San Pascual.
Estas pulseras están diseñadas para detectar más de 1.000 sustancias potencialmente utilizadas en casos de sumisión química, como el GHB y la ketamina. El dispositivo incluye un código QR que permite la geolocalización de la persona usuaria, facilitando una respuesta rápida en situaciones de emergencia.
En Almassora, durante las fiestas patronales de la Mare de Déu del Roser, se distribuyeron pulseras Centinela Premium capaces de identificar hasta 22 tipos de drogas en bebidas, incluyendo aminas y benzodiacepinas. Estas se repartieron en los puntos violeta y en espacios de la Unidad de Prevención Comunitaria en Conductas Adictivas (UPCCA).
También Les Alqueries implementó esta medida en la fiesta de Nochevieja, repartiendo 1.000 pulseras que cambian de color al detectar sustancias como el éxtasis o MDMA. La iniciativa fue bien recibida por la población y contribuyó a una celebración sin incidentes
Vila-real repartirá 5.000 pulseras durante sus fiestas
Vila-real ha anunciado el reparto de 5.000 pulseras Centinela durante las fiestas de San Pascual. Estas pulseras se distribuirán en centros de secundaria, el Espai Jove y la Casa de la Dona.
Además, estarán disponibles en la carpa itinerante del Punto Violeta y Libre de Adicciones, que se ubicará en diferentes puntos de la ciudad durante los eventos festivos.
Uso de las pulseras
El uso de estas pulseras es sencillo: al introducir el dedo en la bebida sospechosa y mojar la parte de la pulsera con el letrero «Test». De esta manera, se puede detectar la presencia de sustancias alteradas.
Con estas acciones, la provincia de Castellón refuerza su compromiso con la seguridad en eventos festivos. Además, ofrece herramientas efectivas para prevenir la sumisión química y proteger a la ciudadanía.