La entidad pública de gestión de residuos, Reciplasa ha iniciado el vaciado de 26.000 toneladas de residuos en las eras de fermentación y bioestabilización de su planta de reciclaje y compostaje en Onda. El objetivo es reforzar la seguridad de las instalaciones y prevenir posibles incendios ante la llegada del verano. Esta actuación cuenta con una inversión de 1.826.744,88 euros.
Prevención de incendios y mejora ambiental
La operación forma parte del compromiso de Reciplasa con la erradicación de focos humeantes detectados en estas áreas. Esto es producto de la propia degradación de los residuos orgánicos.
Según explicó el presidente de la entidad, Sergio Toledo, el objetivo es “poner todos los recursos disponibles para evitar incendios en las instalaciones, especialmente en las zonas donde se almacenan materiales en proceso de fermentación”. Toledo destacó también que “esta intervención da respuesta a una preocupación vecinal en la zona donde se ubica la planta”.
La superficie total de las eras afectadas por este vaciado alcanza casi 13.000 metros cuadrados. En los primeros cuatro meses de 2025 ya se han retirado más de 7.000 toneladas como parte del operativo.
Gestión de residuos en cifras
Reciplasa cerró el año 2024 con un volumen de 150.597 toneladas de residuos tratados, una cifra muy similar a la registrada en 2023, cuando alcanzó las 150.550 toneladas. Esta cantidad refleja una media diaria de 500 toneladas procesadas en las instalaciones de la entidad. Estas incluyen tanto la Estación de Recepción y Transferencia de Residuos en Almassora como la Planta de Reciclaje y Compostaje en Onda.
Con esta intervención, Reciplasa reafirma su estrategia de mejora continua en la gestión de residuos urbanos. Refuerzan las medidas de seguridad ambiental y eficiencia operativa en sus centros.
