El municipio castellonense de Lucena del Cid está de luto: dos de sus vecinos murieron este martes -al parecer y según las primeras investigaciones- después de intoxicarse con el monóxido de carbono de un brasero mal apagado.
Fueron los familiares quienes se encontraron a los dos miembros de la pareja, tendida en la cama, ya muertos.
El hallazgo del matrimonio de unos 50 años tuvo lugar por la noche cuando la hermana del hombre fue hasta su casa al no tener noticias de ellos en todo el día.
Cuando entró a la casa, pasadas las diez de la noche se encontró los dos cuerpos tendidos en la cama y rápidamente avisaron a los médicos de guardia del centro de salud, que tan solo pudieron certificar su muerte.
El alcalde de Lucena del Cid, David Monferrer, ha explicado que se decretarán dos días de luto en el municipio y que la población tiene que concienciarse sobre el correcto uso de los sistemas de calefacción en casa porque todo parece apuntar al hecho que la defunción del matrimonio se ha debido a la mala combustión de una estufa.
La Guardia Civil investiga las circunstancias de la defunción. La investigación la lleva el equipo territorial de la Policía Judicial de Vinaròs y se está a la espera de los resultados que dictamine la autopsia.
