El temporal de lluvia y viento no ha impedido que los vecinos de Benicàssim puedan celebra su tradicional Día de las Paellas.
A pesar del pronóstico meteorológico, miles de personas se han acercado hasta el municipio para disfrutar de esta jornada de hermandad.
El día ha comenzado con la tradicional ‘Despertá’ para seguir con el almuerzo de hermandad solidario de un euro a favor de San Vicente de Paul.
A partir de mediodía, la actividad se ha centrado en torno a la calle Santo Tomás y adyacentes donde se han preparado cientos de paellas.









Pese a las inclemencias del tiempo, la jornada ha transcurrido con relativa normalidad, en el que se contabiliza que han pasado cerca de 35.000 personas.

