Las cuentas se han aprobado con los votos del equipo de gobierno de PSPV y Unides Podem, la abstención de Ciudadanos y el voto en contra de Partido Popular, Compromís y Vox.
Los tribunales avalan la gestión de Benlloch en la defensa de los intereses de Vila-real y condena al exalcalde Rubert, Ramón Tomás y un consejero por prevaricación.