Ofertar espacios públicos para la venta no sedentaria, es decir ‘les paraetes‘ de las fiestas de la Magdalena no es ninguna novedad, sin embargo este año, con una semana de fiestas plagada de incertezas, un programa aún sin confirmar oficialmente, restricciones en los actos y supresiones de actividades, cualquier cosa que anuncia el ayuntamiento parece resultar de interés.
En este caso se trata de los puestos de venta ambulante que se instalan habitualmente alrededor de las ermitas de Sant Roc y de la Magdalena, para el día de la Romería de les Canyes. En concreto, son de 17 puestos en las inmediaciones de Sant Roc y 7 en las de la Magdalena. No obstante, el acuerdo que ha pasado hoy por junta tiene una matización notable, y es que estos puestos solo podrán vender exclusivamente, agua y refrescos. Al menos según se apunta en el acuerdo: «Con respecto a años anteriores, dada la situación de crisis sanitaria actual y con el fin de evitar aglomeraciones de personas pero teniendo en cuenta las posibles necesidades básicas de las personas que acudan a participar en la Romería, se considera necesario reducir el número de puestos a ofertar y que la actividad comercial se reduzca, única y exclusivamente, a la venta de agua y refrescos».
