La destitución de Salomé Pradas como consellera de Justicia e Interior marca un punto de inflexión en la remodelación del Consell anunciada por Carlos Mazón. Este cambio, centrado en fortalecer la estrategia de reconstrucción tras la devastadora DANA que asoló la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre, refleja la intención del presidente de la Generalitat de dar un giro en su Gobierno para afrontar los nuevos retos.
Pradas, quien también ocupó el cargo de consellera de Medio Ambiente, Agua, Infraestructuras y Territorio en la primera parte de esta legislatura, ha sido sustituida por Juan Carlos Valderrama Zurián como conseller de Emergencias e Interior y por Nuria Martínez Sanchis, quien asumirá la cartera de Justicia. La reorganización de competencias responde a la necesidad de gestionar de manera más específica los efectos de la catástrofe climática.
Una trayectoria marcada por logros y desafíos
Salomé Pradas llegó al Consell con una sólida reputación, destacándose por su trabajo en la modernización de infraestructuras y en la mejora de servicios judiciales. Durante su etapa como consellera de Medio Ambiente, impulsó obras clave como la estación intermodal de Alicante, el proyecto de las rondas viarias de Elche y Castellón, y la revisión de planes de uso de parques naturales. Además, en su paso por Justicia e Interior, lideró iniciativas como el refuerzo del turno de oficio, las mejoras en las condiciones laborales de los bomberos forestales y el planeamiento de los nuevos palacios de Justicia en Gandia y Alzira.
Sin embargo, la magnitud de la DANA y los retos asociados a la gestión de emergencias pusieron en el foco de atención las limitaciones en la capacidad de respuesta del Consell. Esto llevó al presidente Mazón a plantear una reestructuración profunda, que incluye la creación de una vicepresidencia específica para la Recuperación Económica y Social, liderada por el general Francisco José Gan Pampols, y una nueva Conselleria de Emergencias.
Reconocimiento del presidente Mazón
Carlos Mazón destacó la «generosidad política» de Pradas y reconoció su contribución al Gobierno valenciano durante su etapa en el Consell. Según sus palabras, «Salomé ha demostrado un gran compromiso en todas sus responsabilidades, dejando un legado importante en la modernización de infraestructuras y la mejora de la justicia». No obstante, subrayó la necesidad de incorporar perfiles especializados para responder a los desafíos de la reconstrucción.
Los nuevos liderazgos
La reorganización del Consell incluye la incorporación de Marián Cano como consellera de Innovación, Industria y Comercio, y el nombramiento de Venancio Aguado como secretario autonómico en el gabinete del vicepresidente Gan Pampols. Estas designaciones buscan reforzar la capacidad del Consell para gestionar la recuperación económica y social de las zonas afectadas por la DANA.
Con estos movimientos, el presidente Mazón pretende consolidar un equipo de gobierno que responda de manera eficaz a las necesidades de los municipios devastados, restaurando no solo las infraestructuras, sino también la confianza de la ciudadanía en las instituciones valencianas.
Una etapa de reconstrucción
La salida de Salomé Pradas refleja la determinación de Mazón de marcar un antes y un después en su gestión, adaptando el Consell a las exigencias del momento. En los próximos días, se espera que los nuevos consellers tomen posesión de sus cargos y comiencen a trabajar en las áreas que más necesitan atención. La reconstrucción de las zonas afectadas será el eje central del nuevo gobierno, una tarea monumental que requerirá coordinación, experiencia y compromiso.
