jueves, 9 mayo 2024

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Primer mes con la rasqueta de un año de empleo ‘social’ arrancando carteles

Castelló reactivó este mes de septiembre, dentro de las iniciativas municipales de empleo, un programa que da trabajo a una cuarentena de personas en situación de vulnerabilidad durante un año pero cuyas funciones no toda la ciudadanía entiende de la misma forma

Las nuevas brigadas dedicadas principalmente a tareas de limpieza en Castellón de la Plana, cumplen su primer mes de trabajo. Se trata de beneficiarios de los Planes de Empleo Municipal que a través de distintos programas buscan contribuir a la empleabilidad de determinados sectores.

En el caso de los equipos que durante este mes han estado trabajando, se trata de colectivos de difícil empleabilidad o en riesgo de vulnerabilidad. Como novedad, en esta ocasión, sus contratos serán de un año, en lugar de los seis meses, por los que hasta el momento se les podía contratar. Aunque la medida no es nueva y ese siempre había sido el objetivo marcado.

Saben que sus funciones empiezan ahora con la rasqueta y el pozal, pero que sus tareas serán versátiles. “Limpiar lo que nos digan, los carteles que hay pegados por las farolas y las paredes…quitar chicles…lo que haga falta”, comenta una de las trabajadoras de uno de estos equipos.

La mayoría han accedido a estos puestos con la mediación de los servicios sociales municipales. Son diversos en cuanto a edad, entre 24 años y algunos rondando los 60, pero su situación o bien de desempleados de larga duración o por otras circunstancias socio-económicas, hace que cumplan los requisitos para acogerse a este plan.

Los ‘elegidos’ para trabajar

Unas medidas, con las que algunos de quines este mes empuñan la rasqueta, también son críticos y que cuestionan con más o menos argumentación de base. “¡Ya era hora que nos tocara a nosotros!”, comenta un miembro de estas brigadas, “Por qué hasta ahora, no se cómo lo reparten, a mi cuñado, y a un vecino que viven en mi barrio, los han llamado cada año, siempre les toca y a otros que igual lo necesitan más, hasta ahora no les habían dicho nada”.

No obstante, más allá de los comentarios puntuales, las cifras de inserción laboral que generan estos planes, ofrecen un balance “positivo” del que más de una vez los políticos de turno han sacado pecho. Una circunstancia que, en cambio, desde otras organizaciones más críticas, sobre todo quienes tratan también con estos colectivos, no se valoran de igual manera y en ocasiones son consideradas como un parche “sin futuro”, que solo aplaza el momento en que algunos de esos usuarios, “crónicos de los Servicios Sociales”, regresen a pedir “a ver cuando les llaman”.

Sin embargo, más allá del discurso fácil y simplista de uno y otro lado, la realidad es que a cada vecino de Castellón que ha visto a estas brigadas trabajando, habitualmente, son tres o cuatro ideas las que siempre se repiten. Por una parte, desde la perspectiva más cívica, muchos toman conciencia de “cómo está la ciudad” cuando más de una cuarentena de personas llevan un mes recorriendo los barrios limitándose a limpiar carteles pegados y borrar pintadas donde no deberían estar.

La segunda de las visiones, unida a la anterior, es la económica: “¿cuanto costará eso?” y vinculado al mismo interrogante, las ideas del uso que se podría dar a ese dinero realizando tareas más constructivas si realmente no fuera necesaria esa “restauración del estado que debería tener el mobiliario urbano y las paredes”.

Un plan de empleo, más allá de lo político

En cuanto a la iniciativa o autoría de este programa, el actual equipo de gobierno del PP recuerda que “es la primera vez” que se duplica la duración de estos contratos que pasan “de seis meses, como hasta ahora” a un año, lo que implica también duplicar el presupuesto que se destina, y garantizar una estabilidad laboral a los beneficiarios durante este tiempo.

Por su parte, la concejala socialista responsable de empleo en la anterior corporación, Patricia Puerta, recuerda que, Jornals de Vila “es un programa municipal de empleo que pusimos en marcha el Acord del Grau en 2016, un programa que da cobertura a personas en situación de vulnerabilidad y que crea nuevas oportunidades para la mayoría de ellas”.

“Actualmente y tal como se puede ver en la publicación de las bases y convocatoria en el BOP de 20 de mayo, antes incluso de la celebración de las elecciones municipales, el programa tiene una duración de un año; es algo que llevábamos tiempo valorando y que hasta este año no ha podido materializarse”, apunta.
“Es decir que la iniciativa política de este programa es del partido socialista, de hecho el PP en varias ocasiones ha presentado enmiendas para eliminar este programa de empleo”, concluye

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