Destacando los «pocos logros» que desde una Presidencia de una Audiencia Provincial se pueden conseguir, «limitados a detectar dónde está la necesidad, y ser pesado hasta el aburrimiento”, el Presidente de la Audiencia Provincial de Castellón, José Manuel Marco ha hecho balance de sus nueve años al frente de esta institución que ahora abandona por jubilación a los 72 años.
Entre esos éxitos, personales y colectivos, que deja su paso por la Ciudad de la Justicia, Marco ha destacado la creación de la Unidad de Mediación Intrajudicial. Una apuesta, casi personal que no solo se ha consolidado sino que ha terminado por conseguir dotaciones propias de la Generalitat y que, como ha indicado, es actualmente «la que más expedientes de mediación incoa en la Comunitat Valenciana».
Sin embargo, entre las cosas que aún han quedado pendientes, el aún Presidente de la Audiencia Provincial, se ha referido a la reivindicación de juzgados de violencia de género, tanto por una cuestión de cobertura y distancia como por los criterios ordinarios que pueden decretar la necesidad de abrir un nuevo juzgado en función de volumen de trabajo, el módulo de entrada. Algo que Marco ha cuestionado por la singularidad de estos casos donde «no se puede ser tan expeditivo» y «descartar enseguida aquello que «no es relevante» porque hay que escuchar a la persona, y escuchar y escuchar, por lo que la medida no es equiparable a otro tipo de juzgados, ha explicado. «Los jueces españoles somos tremendamente expeditivos y formales (…) pero en el caso de las víctimas del maltrato, la sensibilidad es específica», ha añadido.
Así por una parte, Marco se marcha recordando esa necesidad de ese juzgado reivindicado para Vinaròs, y a la vez planteando la idoneidad de aplicar los mismos criterios para decidir cuando es necesario otro juzgado.
Castellón, pionera en la Unidad de mediación intrajudicial
Incidiendo en la tediosa burocracia que implica insistir una y otra vez en las peticiones que cubran las carencia, Marco ha insistido también la carencia de medios y la voluntariedad con la que en algunos casos se han logrado poner en marcha iniciativas como la oficina de intermediación judicial.
Una unidad que en su momento empezó con un despacho vacío y apenas mobiliario y que posteriormente no solo creció sino que recibió un reconocimiento, siendo pionera y que hoy en día «ya tiene el aval y los medios de la Generalitat Valenciana». Esta oficina ahora, es la que más expedientes de mediación incoa de la Comunitat y cuenta con 79 mediadores de diferentes especialidades.
En otros aspectos, una de las cosas importantes que también se ha logrado, según este balance, es que los partido judiciales de Nules y Segorbe también pudieran acudir al juzgado específico de violencia sobre la mujer de Vila-real. «Esta comarcalización del juzgado de Vila-real fue la primera en toda España», ha recordado.

