El Ayuntamiento de l’Alcora ha abierto un expediente sancionador por un caso muy grave de maltrato animal. Los hechos comenzaron a destaparse el pasado mes de abril, tras el hallazgo de una caja con diez cachorros abandonados junto a un contenedor cercano al cementerio. A partir de ese momento, se inició una investigación que ha sacado a la luz una situación de abandono y negligencia que afecta a más de 40 perros.
Durante las inspecciones realizadas se localizaron dos espacios en condiciones totalmente insalubres: llenos de suciedad y excrementos, sin comida ni agua suficiente, con animales desnutridos, infestados de parásitos y algunos con lesiones graves.
Intervenido y situación
En total, se han intervenido 28 cachorros y 10 hembras adultas, aunque 8 de los cachorros no han podido sobrevivir. Uno de los perros tuvo que ser operado de urgencia por una fractura de mandíbula, y otros presentaban infecciones, heridas abiertas y signos evidentes de desatención veterinaria y alimentaria. Y, a día de hoy, todavía quedan algunos animales a la espera de reubicación debido a la falta de espacios disponibles.
Además, el expediente refleja múltiples incumplimientos legales, como la falta de identificación con microchip y la ausencia de esterilización, obligación recogida en la Ley 2/2023. Esta negligencia ha provocado camadas no deseadas, incremento del sufrimiento y un mayor riesgo sanitario.
Atendiendo a la gravedad de los hechos, y en aplicación de la normativa vigente, el Ayuntamiento propone una sanción económica de 51.000,03 €, compuesta por: 3.000 € por una infracción grave en grado mínimo y 48.000,03 € por tres infracciones graves en grado medio (16.000,01 € cada una).
Objetivo
El objetivo del consistorio es garantizar el bienestar de los animales rescatados y exigir responsabilidades al responsable legal, sin trasladar esta carga económica ni a las protectoras ni a la ciudadanía a través del presupuesto municipal.
Desde la concejalía de Protección Animal se quiere expresar el más sincero agradecimiento a la asociación Huellas Callejeras por su labor y a todas las personas y profesionales que han colaborado para actuar con rapidez y contundencia ante esta situación.
El Gobierno municipal reitera su compromiso firme con el bienestar animal y su política de tolerancia cero frente a cualquier forma de maltrato. “Este caso debe servir para reforzar los mecanismos de control, prevención y concienciación, porque la protección de los animales es una responsabilidad colectiva”.
