La Guardia Civil de Castellón ha investigado al propietario de una explotación porcina en La Vilavella por un delito contra el medio ambiente, tras descubrirse que durante al menos tres años vertió de forma reiterada más de 5 millones de litros de purines en espacios naturales sin control.
El operativo, denominado “Manure”, se inició tras una denuncia contra la granja, considerada responsable de uno de los episodios más graves de contaminación ambiental registrados en la provincia.
Reincidencia y métodos de ocultación
El investigado ya había sido señalado en 2022 por vertidos similares en la Marjal de Nules. Según la Guardia Civil, aprovechaba episodios de lluvia intensa para liberar los purines, diluyendo así los residuos y dificultando su detección.
Los agentes localizaron acequias manipuladas para canalizar el estiércol líquido hacia parcelas forestales y al Barranco dels Forns, cuyo cauce desemboca en la Marjal de Nules-Burriana, un espacio protegido como ZEPA (Zona de Especial Protección para las Aves) y LIC (Lugar de Interés Comunitario).
Riesgos ambientales y sanitarios
Los análisis realizados por el Instituto Nacional de Toxicología y la Confederación Hidrográfica del Júcar confirmaron altas concentraciones de nitratos, amonio y materia orgánica en suelos y aguas. Estos compuestos pueden provocar contaminación de acuíferos, eutrofización, mortandad de peces y daños irreversibles en ecosistemas forestales.
Además, la presencia de nitratos en agua destinada al consumo humano supone un grave riesgo para la salud, especialmente para bebés y personas vulnerables.
Procedimiento judicial en marcha
Las diligencias han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Nules, donde se valoran posibles responsabilidades penales por delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente.
La Guardia Civil recuerda que la colaboración ciudadana es clave en la detección de delitos ambientales e invita a denunciar cualquier práctica contaminante.

