La Guardia Civil ha iniciado una investigación contra un individuo por su posible implicación en un delito ambiental relacionado con la fauna y flora silvestre.
El Seprona de la Guardia Civil de Segorbe, unidad especializada en delitos medioambientales, llevó a cabo esta actuación en Segorbe, tras detectar el pasado 23 de febrero la oferta de varios ejemplares de fauna vertebrada en páginas de compraventa por internet.
Entre ellos se encontraban una cabeza de corzo (Capreolus capreolus), una de jabalí (Sus scrofa) y una gineta (Genetta genetta), todos ellos naturalizados.
La identificación del presunto responsable, residente en la localidad de Víver, permitió inspeccionar el lugar donde se encontraban las especies.
Dado que el investigado carecía de autorización para la tenencia de estos ejemplares, se procedió a su decomiso.
La posesión no autorizada de determinadas especies puede constituir una infracción de la normativa medioambiental vigente, en particular de la Decisión del Consejo del 3 de diciembre de 1981 sobre conservación de fauna y flora silvestre en Europa.
La legislación aplicable incluye la Directiva 92/43/CEE del Consejo, de 21 de mayo de 1992, sobre conservación de hábitats naturales y especies silvestres, y el Decreto 32/2004, de 27 de febrero, del Consell de la Generalitat, que establece el Catálogo Valenciano de Especies de Fauna Amenazada. Este marco legal fue modificado por la Orden 2/2022, de 16 de febrero.
Como resultado, se han incoado diligencias penales por presunta tenencia y comercialización ilegal de fauna protegida.
Las diligencias instruidas han sido remitidas al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Único de Segorbe.
