En plenas fiestas de agosto, a lo largo y ancho de la Comunitat Valenciana y con ‘els bous al carrer’ como denominador común de la inmensa mayoría de los festejos, la eterna polémica de los menores en las celebraciones taurinas, se reabre. Pero esta vez, no solo se refiere a su participación, algo que ya está regulado, pese a los incumplimientos que se siguen produciendo, sino que esta vez se va mas allá y se habla de su ‘presencia’.
La Fundación Franz Weber ha exigido esta mañana una respuesta legislativa contundente al Consell, respecto la presencia de menores, después de conocer -según indica en un comunicado- «la segunda cogida a una persona menor de edad en menos de quince días durante la realización de bous al carrer en el término municipal de Vilamarxant».
Tras recordar que la Ley valenciana de derechos y garantías de la infancia y la adolescencia, expone claramente que las personas menores de edad tienen prohibida la entrada o la participación directa a «actividades donde exista daño sobre animales u otras personas«, tal y como detallan los artículos 70.1 y 72.1., la organización habla de que la actua reglamentación no es suficiente.
Además de eso, señala que no solo es insuficiente, sino que está prácticamente hecha a medida del lobby taurino, «cuyo interés es la máxima desregulación posible, tal y como sucedía con la polémica sobre los informes y certificados veterinarios», añade.
Por otro lado también referencia al Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas, que en el marco de sus Observaciones Finales, pidió a España en 2018 alejar a todo menor de la “violencia de la tauromaquia”. Recomendación que se extendió en 2023 a todos los Estados parte reclamando que estos grupos poblacionales fueran alejados de toda violencia, incluida la ejercida sobre animales, recuerdan.
La petición y las conclusiones
Así, la petición concluye que el Govern valencià «debe asumir su responsabilidad y avanzar hacia el veto total, tanto de participación como de visualización, toda vez que ha quedado constatado que el marco actual es insuficiente, vulnera los derechos de la infancia y la adolescencia, y no traslada responsabilidad alguna a las familias, también objetivo de toda reglamentación relacionada con personas menores de edad».
Por último, esta fundación, señala que en apenas dos semanas se han producido dos hechos de máxima gravedad, donde ha corrido peligro la vida de dos menores y donde se constata que las medidas de seguridad son insuficientes o son vulneradas con facilidad.
