La flor artificial gana terreno en los cementerios de la Comunitat. Según calcula el Gremio Artesano de Floristas de la Comunitat Valenciana uno de cada 3 ramos o arreglos florales en los camposantos valencianos son sintéticos y este 2023 precisamente notan un incremento inédito hasta la fecha en una tendencia que parece que se vaya a consolidar. La demanda de este producto «a lo mejor el pasado año era un 20 o un 25% y este año un 35%«, indica Juan Lluesma, presidente del colectivo.
«Clientes que toda la vida han comprado natural este año te dicen házmelas muy bonitas, con flor que parezca natural, pero se lo llevan artificial», añade. También coincide Loli Lafont, tesorera de la Asociación de Vendedores de Mercaflor de València y afirma que en el Cementerio General de València el 70% son flores de plástico.
Las creaciones en plástico son iguales que con flor natural pero asegura que luzcan más tiempo. Ahora los floristas, durante el año, «en vez de hacer uno natural y otro artificial hacen dos artificiales» y el cliente lo coloca en el cementerio por Todos los Santos y «lo renueva cuando ya está muy descolorido» en épocas de muchas horas de sol, explica Lluesma.
Claves y rosas, las favoritas
Por lo general, y especialmente en flor natural, Claveles y rosas siguen siendo los favoritos de los valencianos, relata Lluesma, aunque en esta época se agotan todas las flores. Las importaciones de Colombia, Ecuador y Holanda permiten tener una variedad de oferta. En el caso de la asociación Mercaflor, que principalmente venden crisantemos de producción propia a mayoristas de la Comunitat y de otros puntos de España, las creaciones más solicitadas son las bolas en un color, a elegir entre blanco rojo, amarillo o rosa y las «terrinas» en tres colores, que es un arreglo característico de estos floristas.
Respecto a precios, los dos colectivos afirman que la población no verá subidas este año. Los precios el pasado año se incrementaron alrededor de un 5% en la venta al público. En 2023, indica Loli Lafont que la subida de costes de materias primas como turba, bandejas o macetas ha rondado el 20% pero apenas se ha repercutido un 3% en la venta al público.
Los precios medios de un ramo de claveles puede oscilar entre 20 euros la docena y 30 docena y media, dependiendo del tipo de arreglo, puede variar. En el caso de las jardineras para los nichos se sitúa en torno a los 50 euros, que variará según el tipo de flor.
Afortunadamente, los dos colectivos celebran que la campaña está siendo buena. Juan Lluesma se hace eco de los comentarios de los floristas de las tres provincia del Gremi en WhatsApp. «En el grupo que estamos 200 todos dicen que va muy bien no podemos quejarnos en eso. Son tiempos difíciles».
Denuncias a bazares multiprecio
Sin embargo, la alegría es contenida. En los últimos días, el Gremio Artesano de Floristas de la Comunitat Valenciana ha dirigido un escrito a la Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo para denunciar que se están realizando arreglos florales en bazares multiprecio, donde solo se permite la venta de flor sin trabajar. En su escrito el colectivo reclama que la Conselleria tome medidas y afirma haber detectado «multitud de actuaciones a margen de la legalidad«. Se trata de una práctica que se ha desarrollado durante los últimos años especialmente con motivo de la festividad de Todos los Santos, cuando ofrecen la decoración y arreglo de centros y ramos con flor artificial, pero a veces con flor natural. «En casi todos los pueblos hay quejas«, sostiene Lluesma, por lo que esperan que desde la Generalitat controlen y hagan cumplir la normativa.
