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martes, diciembre 16, 2025

Aumentan un 10% las personas que piden ayuda a Cáritas Castellón, con la falta de vivienda ‘digna’ como su principal problema

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Un total de 16.568 participantes demandaron el soporte de la entidad diocesana en la provincia durante el pasado año, y con ellos sus familias, en total 29.000 personas, que se beneficiaron de los recursos para los que se destinaron más de 6,6 millones de euros

Familia monomarental con uno o más hijos a cargo y con una vivienda en la que habitan que no cumple los mínimos para considerarla «digna». Este es uno de los perfiles más numerosos, de los núcleos familiares a los que Cáritas Diocesana de Castellón ha destinado sus recursos durante el pasado año.

Son los datos que recoge la memoria del 2023 en la que se ha detectado un aumento del 10% de participantes. Es decir, en las personas que se han dirigido a la entidad y que han pasado de unos 15.000 a los 16.580. Sin embargo, los beneficiarios superan las 29.000 personas, ya que detrás de cada rostro que pide ayuda, están los de sus familias o quienes dependen de ellos.

Todo esto representó un total de 231.021 intervenciones, con un 53% de hombres frente a un 47% de mujeres. En cuanto a las nacionalidades, el 37 % fueron españoles frente al 73% restante en el que predominan las personas con origen en América del Sur.

Respecto a los recursos destinados a las diferentes acciones sociales, se destinaron más de 6,6 millones de euros. Teniendo en cuenta aquí también que los donantes periódicos bajaron «pero los donativos y otras aportaciones han subido con lo cual, parece que se equilibra la balanza», como ha explicado el director de la entidad Francisco Mir, que ha estado acompañado del Obispo de la Diócesis de Segorbe-Castellón, Casimiro López Llorente en la presentación de este informe.

Llamada a la «sensibilidad» política en el acceso a la vivienda

La memoria refleja también como el problema del acceso a la vivienda se ceba en los colectivos más vulnerables, que bien no pueden acceder a ella se ven obligados a pagar cantidades desorbitadas en unos precios abusivos por los que apenas pueden adquirir una habitación que muchas veces, «no reúnen las condiciones mínimas», como han explicado.

Al respecto, Cáritas en la Comunitat Valenciana ha redactado un texto que presentará a la Generalitat Valenciana, en el que solicita a las administraciones públicas que se facilite el acceso a personas y familias en situación de vulnerabilidad o exclusión social a las ayudas al alquiler, cambiando los requisitos y forma de acceso, así como aumentando la dotación presupuestaria.

La entidad también pide a las administraciones que se garanticen viviendas suficientes para personas en situación de emergencia habitacional, cumpliendo al menos con una dotación residencial del 3%; y que se aumente el parque público de vivienda con una estrategia integral que prevenga la reproducción de dinámicas segregadoras.

Sin embargo, en cuanto a la posibilidad de que la entidad pueda actuar también denunciando las situaciones abusivas, esta vía, según han apuntado corresponde a los afectados.

Trabajos que no salvan de la exclusión

En cuanto al acceso al empleo, otro de los problemas importantes en los que Cáritas también forma y acompaña, la actual situación del mercado ha provocado desde hace tiempo que tener un trabajo ya no sirva de «garantía para no caer en la exclusión o salir de ella». No obstante, cabe destacar que en 2023 lograron un empleo a través de la intermediación de Cáritas 306 personas, lo que supone un 40% más que en 2022.

También se ha constatado que las personas extranjeras son más vulnerables y ha aumentado, sobre todo, la procedencia de países hispanoamericanos, mientras que también se ha incrementado «de forma significativa» el número de personas en situación administrativa irregular.

La Memoria recoge, además, que el 59,3% de las personas atendidas por el Servicio de Acogida y Acompañamiento de Cáritas vive en la extrema pobreza, al no disponer de ningún ingreso. Así mismo, se contempla un incremento de la afección de salud mental en los colectivos que atiende Cáritas, con mayor preocupación en las personas más jóvenes.

Techo y comida

Respecto a los recursos habitacionales, el Centro de Acogida Temporal Mare de Déu de LLedó, acogió en 2023 en el albergue a 510 personas. Prestó servicio de comedor a 1.215 personas frente a las 1.064 de 2022 y ofreció 8.136 servicios de ducha. Por otra parte, el proyecto Bartimeo realizó un total de 737 intervenciones a personas en situación de calle.

La presentación de esta Memoria, que se enmarca en la Semana de la Caridad que este año lleva por lema ‘Allí donde nos necesites’, y refleja también que Cáritas contaba en 2023 con 772 voluntarios, 1.759 donantes, 139 integrantes del personal laboral y 84 Cáritas Parroquiales en la Diócesis.