“No ha habido ningún tipo de intoxicaciones entre el personal de la base del SAMU de Morella”. Con esta contundencia ha desmentido el servicio de comunicación del CICU la denuncia realizada por UGT donde aseguraba que “al menos seis trabajadores habrían sufrido intoxicaciones por deficiencias en la caldera”.
Así, en el escrito que se ha difundido se explica que fue el martes cuando se le comunicó a la dirección del Servicio de Emergencias Sanitarias (SES) una avería en la caldera. Cuneta que “esa misma mañana acudió un técnico para repararla” Además añaden que “Durante los trabajos de reparación no hubo ningún vertido por lo que no hay ningún riesgo para la salud, lo único que ocurrió es que se desprendió olor por la propia manipulación de la caldera”.
Explican también las mismas fuentes que el miércoles ya estaba funcionando. Además añaden que precisamente, la caldera de esa base se instaló hace casi 3 años y se aprovechó la misma salida de humos que tenía la anterior. Sin embargo, sí que reconocen que “al no ser del mismo tipo y para prevenir problemas futuros, la dirección del SES ha aprobado la realización de una salida de humos propia, por ello, es por lo que ahora no está en funcionamiento, pero nunca porque tenga ningún tipo de fuga, ni problema de combustión“.
EL argumentario que contrasta con las declaraciones del sindicato UGT difundidas por los medios añade que en la base de Morella “la caldera está en la planta baja y los dormitorios y áreas del personal están en la segunda planta”.
Por último aseguran que “durante el tiempo que dure la obra de la nueva salida de humos, en la base disponen de calefactores que mantienen la temperatura adecuada”.
Además – concluyen- ” no ha habido comunicación o denuncia por ningún profesional al servicio de Prevención de Riesgos Laborales correspondiente, por lo que se entiende que no se percibe ningún tipo de riesgo para la salud”.
