El alcalde de Burriana, Jorge Monferrer Daudí, ha anunciado este jueves el cese de los tres concejales de Vox que votaron en contra de la bajada de impuestos planteada por el equipo de gobierno en el Pleno Extraordinario celebrado el día anterior. La decisión, según ha explicado el primer edil, se adoptó “tras una profunda reflexión”. Esto marca el final del pacto de gobierno firmado hace dos años y medio entre el Partido Popular y Vox.
Monferrer ha asegurado que se trata de una decisión dolorosa pero meditada, tomada “por coherencia y por respeto a la palabra dada a los burrianenses”. “Desde el primer día que pisamos este Ayuntamiento, nuestro único objetivo ha sido trabajar por Burriana y por mejorar la vida de nuestros vecinos. Eso es lo que hemos hecho sin descanso. Por eso nos duele llegar a esta situación, pero en política no vale todo”, ha afirmado.
El alcalde ha recordado que durante las últimas cuatro semanas se intentó evitar la ruptura mediante la negociación de las ordenanzas fiscales. Considera este un paso imprescindible para disponer de presupuestos en 2026. “La aprobación de los presupuestos es la herramienta que nos permite transformar Burriana, dar estabilidad y garantizar el futuro de nuestra ciudad”, ha subrayado.
Monferrer asegura que el voto en contra de Vox es «una decisión teledirigida desde fuera de Burriana»
En su intervención, Monferrer ha explicado que la propuesta rechazada era idéntica a la aprobada hace un año en el mismo salón de plenos. También era similar a la que se aprobó recientemente en Castellón. Sin embargo, lamentó que “una llamada desde fuera de Burriana” condicionara el voto de los ediles de Vox. Según su juicio, esto demuestra que se trató de una decisión teledirigida y ajena a los intereses locales. “A día de hoy nadie ha sabido explicarnos por qué se vota en contra de bajar los impuestos a los burrianenses”, ha señalado.
El primer edil ha insistido en que ese voto en contra supone una vulneración del acuerdo de gobierno, que incluía en su punto número 10 la rebaja fiscal. Ha asegurado que cruzó “una de las líneas rojas” marcadas desde el inicio del pacto. Durante los días previos al pleno, él y varios miembros del equipo municipal mantuvieron numerosas reuniones con los concejales de Vox “para intentar revertir una postura que se sabía que nos llevaba a la ruptura del gobierno”, pero sin éxito.
Monferrer ha calificado la situación como “incomprensible para la ciudadanía”. Ha remarcado que Burriana “necesita un gobierno estable, previsible y que no esté sometido a decisiones tomadas a cientos de kilómetros por personas que no conocen nuestra realidad”.
Pese a reconocer que la medida conlleva riesgos, el alcalde ha destacado que su equipo asume las consecuencias “con serenidad y responsabilidad”. “Sabemos que implica riesgos. Sin embargo, entendemos que los principios y la palabra dada a los votantes tienen un valor que no estamos dispuestos a traicionar”, ha afirmado.
Finalmente, Monferrer ha lanzado un mensaje de tranquilidad a los vecinos. Ha asegurado que el gobierno local seguirá trabajando “con más fuerza que nunca” para continuar la transformación de la ciudad. En los próximos días, el Ayuntamiento celebrará reuniones internas para redistribuir las áreas y competencias de los concejales cesados entre los miembros del Partido Popular.
