Montán ha confirmado el hallazgo del que considera el sistema defensivo más complejo de la Edad de Hierro en el yacimiento arqueológico de Monte Calvario. El Ayuntamiento ha explicado que los trabajos de excavación y restauración, financiados con una subvención de 150.000 euros destinada a Bienes de Interés Cultural, han aportado nuevos conocimientos sobre la técnica constructiva de las comunidades del Hierro Antiguo en este enclave estratégico del Alto Mijares.
El alcalde de Montán, Sergio Fornas, ha visitado el yacimiento para conocer el avance de la actuación, que ha permitido documentar el sistema de construcción de la Muralla Este, ubicada en el acceso principal al poblado. Durante la visita, ha agradecido a la Generalitat “el compromiso con nuestro municipio para ayudarnos a seguir descubriendo más y mejor nuestros orígenes. Montán atesora importantísimos recursos arqueológicos como se sigue demostrando en esta excavación, y desde el Ayuntamiento seguimos trabajando en descubrirlos y ponerlos en valor”.
Un sistema constructivo singular
La estructura defensiva está basada en una sucesión de terrazas niveladas con rellenos, una técnica conocida en la antigüedad que se adapta al relieve y refuerza la protección exterior de la muralla. En Monte Calvario, este procedimiento adquiere una singularidad destacada, lo que ha permitido identificar el enclave como uno de los más complejos del periodo en la Comunitat Valenciana.

Visitas turísticas para dinamizar el valor patrimonial
El Ayuntamiento trabaja, a través de la Oficina de Turismo y del equipo técnico responsable de la excavación, en el diseño de visitas turísticas que permitan dar a conocer el patrimonio arqueológico del municipio. La previsión es que, una vez finalizada la actuación, el visitante pueda recorrer un itinerario que partirá desde Montán por una senda entre pinares hasta la puerta de la fortificación. Desde ese punto de acceso se podrá observar con claridad la distribución del asentamiento, los espacios destinados al almacenamiento de mercancías y los habitáculos situados tras la muralla, en un enclave vinculado históricamente a los intercambios comerciales de la Edad de Hierro.
Un recorrido interpretativo que permitirá al público vivir una experiencia inmersiva en un entorno natural y patrimonial de gran valor para el interior de Castellón.



