Llegado el verano, por desgracia, volvemos a hablar de incendios forestales. Es devastador, no sólo por las hectáreas verdes que desaparecen, sino por el peligro que supone para las poblaciones rurales que tanta vida dan a una población cada día mas ahogada por las ciudades y su trepidante rutina diaria.
Después de la pandemia que nos encerró a todos en casa, llegan momentos de querer buscar libertad y tranquilidad, y el destino estrella son los pulmones verdes de nuestro territorio. Crecen las visitas a los parques naturales y con ello, aumenta el riesgo de incendios.
Tras estos acontecimientos, la Generalitat Valenciana debería aumentar recursos para detener y extinguir posibles incendios, y priorizar lo más importante, que es trabajar para evitar que se produzcan dichos incendios. ¿Es suficiente estar preparados para apagar los incendios?, yo creo que no.
La Generalitat Valenciana tiene a su disposición unos fondos de prevención que se dedicaron en parte a construir cortafuegos. Pero un plan de prevención ha de componerse de más medidas, tales como depósitos de extinción, pistas de acceso y recorrido por terreno forestal, zonas de cambio de sentido para viales sin salida, fajas auxiliares, hidrantes, planes de sensibilización, vigilancia, etc…y a día de hoy la consellera Mollá tiene paralizadas prácticamente todas las acciones de prevención.
Es triste ver como en la Comunitat Valenciana sigue habiendo conatos e incendios cada año y, gran parte, es por culpa de la poca inversión de la Generalitat Valenciana en la limpieza de nuestros montes y adecuación de estos, ya que las políticas en materia de medio ambiente de PSOE y Compromis son inexistentes.
El turismo rural aumenta, las temperaturas aumentan, por tanto, la inversión en prevención debe aumentar.
A día de hoy se sigue sin contar con los propietarios privados forestales para coordinar y ejecutar actuaciones silvícolas. Son pieza clave para realizar una gestión forestal sostenible y evitar que nuestros montes se encuentren en esta mala situación.
Esperemos no tener que seguir lamentando más pérdidas año tras año. PSOE y Compromís se daban golpes en el pecho autodenominándose únicos defensores del medio ambiente y son los que lo están matando con su parálisis e ineficacia. ¡Reaccionen antes de que sea demasiado tarde!
Tenemos grandísimos tesoros verdes en nuestra Comunitat, y desde la Generalitat se deben poner todos los medios en limpiarlos, vigilarlos y prepararlos para que todos podamos disfrutarlos.