El Plan especial de liquidación de pagos pendientes, impulsado este verano por la concejala de Hacienda, Sabina Escrig, zanjará esta semana todos los retrasos en la nómina de los funcionarios municipales, con el pago de casi un millón de euros a los empleados públicos.
El Plan pretende dar respuesta a los retrasos –tanto a proveedores como a funcionarios o propietarios afectados por sentencias urbanísticas– que se han derivado de la “tormenta perfecta” provocada por las diferentes crisis que han impactado en los últimos años en Vila-real, desde la “crisis continua de la deuda heredada y la de los empastres urbanísticos del PP, con más de 60 millones de euros pagados hasta la fecha” a la crisis de la covid-19 o la alta inflación y crisis energética a raíz de la guerra de Rusia contra Ucrania.
“Por si no era suficiente, hemos vivido recientemente dos convocatorias electorales -locales y autonómicas y generales- que generan una inestabilidad administrativa que viene a sumarse a esta tormenta perfecta”, valora Escrig.
El alcalde, José Benlloch, ya puso en marcha el pasado mes de noviembre el Plan extraordinario de reajuste y priorización presupuestaria, cuyas medidas de ahorro han permitido que, “con responsabilidad y prudencia”, el consistorio pueda hacer frente en estos momentos a las deudas pendientes provocadas por la confluencia de las diferentes crisis.
“A través de estos dos planes, estamos avanzando en el pago a proveedores, impulsando diferentes expedientes de modificación de créditos que, este verano, nos han permitido saldar casi dos millones de euros atrasados, incluyendo los 635.000 euros del pago pendiente de sentencias urbanísticas del PP, la gran losa de las cuentas municipales”, recuerda.
En el marco de este plan especial, las concejalías de Hacienda y de Recursos Humanos están ultimando el expediente de nómina que cobrarán los funcionarios municipales este viernes o el sábado y en el que se liquidará prácticamente un millón de euros –388.650 euros por horas extraordinarias pendientes desde octubre de 2022 al pasado agosto, y los complementos de productividad desde el pasado mes de marzo a septiembre, con un montante de 660.308 euros-.
Este millón de euros se sumará a la nómina ordinaria de los funcionarios, hasta alcanzar los 1,9 millones brutos.
El alcalde ha dado prioridad absoluta a esta cuestión; por eso ordenó a la concejala de Hacienda y al resto del equipo de gobierno que, antes de asumir nuevos compromisos de gasto, trabajasen para liquidar este año todo lo que la “tormenta perfecta de las crisis y la herencia del PP” había retrasado.
Benlloch y Escrig han querido agradecer de manera especial el trabajo, la paciencia y la comprensión de todos los funcionarios municipales ante los retrasos, así como, en particular, al personal de los departamentos de la Oficina Presupuestaria, Intervención, Tesorería y de Recursos Humanos por su esfuerzo para lograr que la liquidación de estas cantidades pendientes pueda materializarse ya en la nómina de septiembre.
