Sant Mateu ha celebrado este fin de semana su undécima edición de la feria medieval, transformando su casco antiguo en un vibrante escenario que transportó a los visitantes a los siglos XIII, XIV y XV. La ceremonia inaugural, el viernes, marcó el inicio de tres días de intensa actividad y recreación histórica.
El Pla de Baix se convirtió en el centro de atención con los emocionantes torneos de caballería. Caballeros ataviados con armaduras brillantes compitieron en justas y demostraciones de habilidad que cautivaron al público. Estos torneos, de acceso gratuito, se destacaron como uno de los principales atractivos, especialmente para las familias y los amantes de la historia.
Más de 100 puestos de mercaderes llenaron la plaza Mayor y las calles del casco antiguo. Los visitantes pudieron disfrutar de una amplia variedad de productos artesanales y gastronómicos, desde joyería y ropa medieval hasta deliciosas viandas y bebidas tradicionales. Los talleres de oficios tradicionales, donde artesanos demostraron técnicas de herrería, cerámica y tejido, ofrecieron una fascinante mirada al pasado.
La animación callejera fue constante y variada, con músicos, bufones y trovadores recorriendo las calles y ofreciendo espectáculos que alegraron y entretuvieron a todos los presentes. El paseo de ocas y las exhibiciones de cetrería, donde majestuosas aves de presa demostraron su destreza, añadieron un toque especial a la atmósfera medieval.
El evento también contó con un espacio infantil que hizo las delicias de los más pequeños con juegos de ingenio, talleres, tiovivo y corrales con animales. Las representaciones históricas y el campamento militar proporcionaron una visión educativa y entretenida de la vida en la Edad Media.
Con la XI edición ya concluida, Sant Mateu se prepara para futuras ediciones, prometiendo seguir mejorando y ofreciendo experiencias inolvidables a todos los que deseen vivir un auténtico viaje al pasado. La feria medieval se ha consolidado como un evento imprescindible del verano, posicionando a Sant Mateu como un destino de referencia para el turismo de interior en Castellón. La magia de la Edad Media ha dejado una huella imborrable en Sant Mateu y en todos aquellos que tuvieron la fortuna de asistir a este evento único. La cita ya está marcada para el próximo año, cuando la localidad volverá a abrir sus puertas al tiempo y al asombro.