La ministra de Sanidad, Mónica García, no descarta que las mascarillas vuelvan a los centros de salud y hospitales si se superan indicadores relacionados con gripe y Covid-19 durante los próximos meses de otoño e invierno.
«Las herramientas y las medidas que tenemos contra los virus respiratorios son la vacunación, higiene, mascarillas y medidas de contención, no hay mucho más«, ha señalado García al ser preguntada en la rueda de prensa posterior al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) por la posible vuelta de las mascarillas en los centros de salud y hospitales.
Así, la ministra ha informado de que este viernes se ha tratado en el CISNS un documento con las comunidades autónomas que establece criterios comunes de actuación en gripe y Covid-19 y que «tomará cuerpo definitivo» el próximo 17 de octubre en la Comisión de Salud Pública.
«Es un documento técnico que se está trabajando en las diferentes comisiones y las ponencias, pero que queríamos unificar tanto los criterios técnicos como los criterios políticos como muchas veces nos han demandado los propios consejeros», ha explicado la ministra.
Al hilo, ha asegurado que se está trabajando este texto con las CCAA para anticiparse y prevenir estas situaciones y que «no tenga que ser el Ministerio de Sanidad el que diga a las comunidades lo que tienen que hacer también«.
«No se trata solo de medidas una vez que nos encontramos en el escenario, sino medidas de cómo nos podemos anticipar a esos escenarios en el momento en el que empezaremos a ver algunos indicadores que empiezan a subir, porque actuar cuando la curva está subiendo exponencialmente ya hemos visto que nos trae complicaciones», ha explicado.
García espera que con este documento, del que se conocerán todos los detalles el próximo 17 de octubre tras la Comisión de Salud Pública, se eviten «complicaciones» como las de año pasado. «Ya visteis las complicaciones que tuvimos el año pasado para hacer una medida que nosotros consideramos que era básica, que es ponerse una mascarilla en los centros sanitarios, cuando la curva se había disparado. Nosotros creemos que se puede actuar antes y que por eso necesitamos este documento», ha recalcado.
En concreto, la responsable de Sanidad ha explicado que el texto servirá para proponer indicadores que permitan caracterizar cuál es la situación epidemiológica en función de una combinación de diferentes indicadores epidemiológicos como la transmisión, gravedad, tasa de incidencia, tasa de hospitalización, ingreso en UCI o letalidad. Además, se establecerán diferentes escenarios en base a esos indicadores y se contemplarán recomendaciones.
«Esto solo se había hecho anteriormente con el Covid-19 y por eso es pionero que desde el Ministerio estemos impulsando que ahora también se haga con la epidemia de la gripe de este año para que no nos pille el toro», ha agregado la ministra.
REGISTRO DE PROFESIONALES
Durante la celebración del CISNS, la ministra ha dado la bienvenida a la consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, María del Rocío Hernández, al consejero vasco de Salud, Alberto Martínez, y a la consellera de Salud de la Generalitat, Olga Pané, por su primera participación. Precisamente con Pané, García ha resaltado su asistencia al CISNS después de 10 años de ausencia de representantes de esta región, algo que la ministra considera «un símbolo del nuevo tiempo de diálogo«.
Asimismo, durante el encuentro se ha tratado la situación del Registro Estatal de Profesionales Sanitarios (REPS), algo que García considera «una herramienta básica para saber dónde están los profesionales, qué están haciendo y cuál es su especialidad».
«Tenemos ahora mismo el registro de profesionales, creo que relleno en un 78 por ciento«, ha señalado la ministra, a la vez que ha indicado que «son las comunidades las que tienen que ir alimentando ese registro para que saber cuál es el número de profesionales».
Así, también se han abordado asuntos relacionados con el anteproyecto de Ley de prevención del consumo de alcohol y de sus efectos en las personas menores de edad y el proyecto de Real Decreto por el que se regula la evaluación de tecnologías sanitarias. Además, se ha aprobado el acuerdo para la designación, redesignación y revocación de servicios y unidades de referencia (CSUR) del SNS.
«También ha habido un acuerdo para el reparto de la distribución de fondos en materias tan importantes también como el tabaquismo, el plasma o el tema de la distribución territorial de la biomonitorización», ha añadido García.
En concreto, se ha aprobado la distribución territorial y los criterios de reparto de los créditos gestionados por las comunidades autónomas y las ciudades de Ceuta y Melilla con destino a la implementación de medidas y planes frente al tabaquismo, por un importe de 1.500.000 euros.
Así, también se ha aprobado la distribución territorial y los criterios de reparto de los créditos gestionados por las comunidades autónomas con destino a la obtención de plasma humano, en el marco de la estrategia nacional para la autosuficiencia en plasma, por un importe de 2.500.000 euros.
Además, se ha acordado aprobar la distribución territorial y los criterios de reparto de los créditos gestionados por las comunidades autónomas y las ciudades de Ceuta y Melilla con destino al desarrollo del sistema de biomonitorización, por un importe de 1.500.000 euros.