En el Día Mundial del Donante de Sangre, el Centro de Salud de Onda ha recopilado datos que muestran que, durante los primeros cinco meses del año 2024, un total de 439 ondenses han participado en la donación de sangre. Este acto de compromiso con la salud y bienestar de sus vecinos demuestra que, según datos de Sanitat, Onda es una de las ciudades más solidarias de la provincia.
De los 439 ondenses que expresaron su deseo de donar sangre, 383 pudieron realizar sus donaciones, contribuyendo a mantener los niveles necesarios de sangre y hemoderivados. Estas donaciones son cruciales para garantizar tratamientos médicos, cirugías y apoyar a pacientes en situaciones de emergencia. Se registraron 56 casos en los que las donaciones fueron rechazadas por diversas razones, asegurando la seguridad y calidad de las donaciones recibidas.
Asimismo, el aumento de 11 nuevos donantes es un testimonio del compromiso creciente de Onda con la donación de sangre. Este incremento es un indicador positivo de conciencia cívica y solidaridad de los ondenses. En este sentido, la alcaldesa de Onda, Carmina Ballester, ha agradecido a los vecinos de Onda por su “generosidad y participación activa en esta causa fundamental para fortalecer el sistema de salud local y salvar vidas”. “También quiero extender mi agradecimiento al personal médico, enfermeros y voluntarios que han trabajado para que estas donaciones sean posibles”, ha añadido.
Cabe recordar que en 2023 fueron un total de 1037 ondenses donantes de sangre, marcando un aumento significativo en comparación con el año anterior y lo que se prevé que también se batirá este año.
Servicios de Emergencia Sanitaria
En relación con la salud de los ondenses, recientemente el Ayuntamiento firmó un convenio crucial para la mejora de los servicios de emergencia sanitaria, mediante la cesión gratuita a la Conselleria de Sanidad del inmueble conocido como la Casa del Conserje, situada junto al Casal Jove.
Este espacio, ahora destinado a los técnicos de emergencias sanitarias de guardia, permite proporcionar un entorno adecuado para los profesionales del Soporte Vital Básico (SVB), mejorando así las condiciones de trabajo y la eficacia del servicio de emergencias.
