El Consell Valencià de Cultura (CVC) ha instado este lunes al Ayuntamiento de Fanzara a “reconsiderar para su retirada” la ordenanza municipal de fachadas aprobada en enero de 2024 por considerar que “va en contra” de uno de los valores del Museu Inacabat d’Art Urbà (MIAU) que desde 2014 “ejerce su actividad libre de controles ideológicos y a favor de la libertad de expresión artística“.
En este sentido, han valorado positivamente que el consistorio y la Associació MIAU –organizadora del evento– redacten de forma conjunta un documento en el que se mantengan “las mismas condiciones en las que ya se ha celebrado el festival” que sirva, a su vez, como “marco legal para sacarlo adelante cada año”.
Así se recoge en las conclusiones del informe sobre la situación actual del MIAU de Fanzara que ha aprobado este lunes el CVC con 13 votos a favor y tres abstenciones.
“El CVC advierte de que las instituciones públicas estatales, autonómicas o municipales tienen que tener un especial cuidado por la defensa de la libertad de expresión en todos los ámbitos, incluidas las manifestaciones artísticas, y tienen que velar por asegurar el derecho de la población a tener experiencias culturales que fomenten, no solo el disfrute estético sino también la conciencia crítica respecto al mundo, incluso si ese fomento alimenta opiniones contrarias a las propias”, destacan las conclusiones del informe.
Además, ponen en valor que el MIAU de Fanzara ha contribuido en “la defensa del derecho a la creación y los derechos culturales de la población” y “está comprometido en combatir la censura”; al tiempo que es “un ejemplo de cómo el arte puede servir como motor de crecimiento económico, mediación cultural y cohesión social”, ha tenido un impacto económico positivo en el comercio local, ha conseguido posicionarse como “referencia mundial de arte urbano”, ha “revitalizado” la comarca del Alt Millars y ha convertido a un pequeño pueblo en “epicentro cultural para la comarca“.
Cabe recordar que la Associació MIAU anunció en enero que paralizaba el festival y “cogía un tiempo de reflexión para valorar su continuidad o no“, al apreciar que la ordenanza “iba en contra de la filosofía del proyecto en el que es fundamental que los y las artistas tengan la libertad de expresarse sin ningún tipo de censura”.
Posteriormente, la Comissió d’Arts del CVC recibió en febrero la petición de la asociación de realizar un dictamen. Además, después, visitó el pueblo de Fanzara y sus murales, junto con Javier López y Rafa Gascó, miembros de la organización del festival. Asimismo, envió dos comunicaciones al alcalde del municipio, Marc Diago, para entrevistarse con él y una solicitud para acompañarlos en la visita, pero aseguran que no han recibido ninguna respuesta por parte del consistorio.
“ATAQUE A LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN”
El informe plantea que el hecho de que el Ayuntamiento solicite un esbozo del mural y una autorización “abre la puerta a posibles censuras“, puesto que la selección de los artistas “no será por su trayectoria o interés de su propuesta (…), sino por la obra en concreto”; algo que, a juicio del CVC, “enturbiaría la naturaleza de mediación artística del festival”.
Por otra parte, considera que el punto concreto de la normativa municipal en el que se establece que no se podrán realizar intervenciones de “carácter político o cualquier otra intervención que pueda herir la sensibilidad de las personas o de los distintos colectivos” “ataca directamente a los principios básicos de la libertad de expresión”.
“Advertimos una posible vulneración de este derecho, aduciendo unas razones poco claras como son el hecho de que puedan herir sensibilidades de personas o colectivos, ya que estimamos que herir una sensibilidad, aunque es un acto muy poco respetable y muy poco deseable, no puede constituir en ningún caso un criterio objetivo”, recalca el informa, y sostiene que “restringiendo el carácter político lo que se acaba restringiendo es el derecho y la oportunidad de quien goza del arte”.
DEBATE
Tras la exposición del informe, José Vicente Navarro ha aseverado que comparte “muchas reflexiones” del documento, pero lo ha calificado de “exagerado”. “Considerar que contra un mural se ha establecido un mecanismo de censura me parece algo fuera de lugar”, ha manifestado, al tiempo que ha denunciado que en el marco legislativo del texto no se ha incluido el artículo 140 de la Constitución que garantiza la autonomía de los municipios.
En esta línea, ha afirmado “no saber hasta qué punto” el CVC “tiene que realizar un esfuerzo cada vez que una asociación se dirige a él”. “Estamos haciendo prevalecer la importancia de una asociación por encima del propio municipio, que es el que determina sus ordenanzas”, ha lamentado Navarro, quien ha remarcado que “todos los días se ponen límites a artistas que van contra la ley”, como quienes pintan una cruz gamada o una pintura que enaltece la violencia, por lo que “tiene que haber algún organismo que tenga la potestad de determinar qué se pone o no en cada municipio”.
Como respuesta, Amparo Carbonell, presidenta de la Comissió d’Arts, ha reivindicado que el CVC “defiende la libertad de expresión y el papel del arte y la cultura como traductor de la realidad e incitador a la reflexión”. “Me parece que no estamos hablando de la misma cuestión“, le ha espetado a Navarro, mientras que Núria Vizcarro ha subrayado que el MIAU “es sobre todo un proyecto de mediación cultural, naciedo desde el pueblo y para crear diálogo, y pasarlo al consistorio le quita mucho de esa naturaleza”.
“Me imagino que la Constitución en ningún momento dirá que un municipio puede hacer todas las ordenanzas que quiera. Me parece que usted esta tergiversando este informe y tengo la sensación de que piensa que estamos regulando y nosotros emitimos informes en los que concluimos cosas, en ningún momento estamos anulando ninguna ordenanza”, ha clarificado, e Irene Ballester ha agregado que este festival es “ejemplo de muchos otros” gracias a “la mediación, la unión de un pueblo y el consenso”.
Rosana Pastor ha criticado la intervención de Navarro, a quien ha puntualizado que los criterios que prevalecen en el informe “no son los de ninguna asociación”, sino los del CVC. “Es muy peligroso lo que ha dicho y puede llevar a engaño a las personas que nos escuchan”, ha agregado. La presidenta del CVC en funciones, Dolors Pedrós, se ha sumado a esta consideración y ha reiterado que el informe “es del CVC y no de ninguna asociación”.
Begoña Martínez Deltell ha insistido en que la “verdadera importancia” del festival es “la capacidad del arte de transformar la sociedad” y ha apuntado que el Ayuntamiento “en teoría no debería intervenir en algo que surge de la iniciativa ciudadana”. A su vez, Inmaculada Vidal ha respaldado el “derecho” del consistorio a publicar una ordenanza y ha subrayado que “como todo ayuntamiento democrático y como representante de los ciudadanos, puede decir y debe decir algo en ese plan”.
Al respecto, Ana Noguera ha remarcado que el MIAU “ha funcionado perfceta, pacífica, creativa y artísticamente y en diálogo vecinal durante diez años”, al tiempo que ha dicho estar “dándole vueltas” al término “carácter político”: “Yo como vivo en una democracia pluralista, eso de ‘carácter político’ lo entiendo como poros sociales que, como decía Aristóteles, soy un Zoon Politikon y de eso vivo”. Y ha citado a la filósofa Adela Cortina en defensa de la libertad de expresión: “No hay ningún ser que sea apolítico o amoral“. “Ya lo dijo Fuster, ‘si no fas tu la política la faran en contra de tu'”, ha apostillado el secretario Jesús Huguet.