Burriana vuelve a ser protagonista más allá de las fronteras provinciales y autonómicas y de nuevo lo es en titulares que aúnan tres palabras: ‘libros’, ‘censura’ y ‘Vox’. El hecho es que una decisión del concejal de Cultura, Jesús Albiol que ordenaba la retirada inmediata «de todos los libros con contenido sexual del área infantil y juvenil de la Biblioteca Municipal de Burriana» ha vuelto a sembrar la discordia política y educativa y enfrentar posturas en discusiones que han trascendido de pleno al ámbito social.
Igual que ya pasó hace algunos meses con la retirada de la suscripción a publicaciones infantiles «en catalán», por razones lingüísticas, esta vez ha sido, según declaraciones del edil de Vox para «proteger la inocencia de los niños». Sin embargo, más allá de lo discutible y subjetivo de este argumentario, el grupo municipal de ultraderecha, que gobierna en Burriana gracias a un pacto con el PP , esgrimió un argumentario legal a través de un comunicado difundido a los medios de comunicación que, tras ser rectificado, hacia referencia a un artículo que regula la Ley de Bibliotecas de la Comunitat Valenciana.
Vox: Una medida para «proteger la inocencia de los niños»
Este es el comunicado íntegro enviado por Vox: «El concejal de Cultura del Ayuntamiento de Burriana, Jesús Albiol, ha ordenado, mediante una providencia, que se retiren inmediatamente todos los libros con contenido sexual del área infantil y juvenil de la Biblioteca Municipal de Burriana y pide su traslado a una nueva área especial para adultos que ha creado para tal fin.
Jesús Albiol ha tomado esta determinación en cumplimiento del artículo 20 de la Ley 4/2011, de 23 de marzo, de Bibliotecas de la Comunidad Valenciana, ya que Burriana es un municipio de más de 25.000 habitantes y la normativa contempla que los libros con contenidos en materia de diversidad sexual, de género o de desarrollo sexual deben permanecer en una sección específica y no en espacios al alcance de menores de edad, como se estaba haciendo hasta ahora.
El concejal de cultura, Jesús Albiol, ha explicado que “Es nuestro deber proteger a los menores, los más vulnerables, y apartarlos de libros con contenidos que no son adecuados para su edad. Desde el primer minuto hemos querido cumplir con la ley que, de manera clara y explícita, indica que los libros con contenido en materia de diversidad sexual, de género o de desarrollo sexual tienen que estar en un área específica, y será en la sección de adultos”.
Y añade: “La izquierda ha pretendido durante estos años pervertir a los menores con unos libros escandalosos con contenidos sexuales explícitos que para nada son educativos; unos textos que se han introducido tanto en las bibliotecas de los colegios públicos como en las bibliotecas municipales y es algo que no vamos a consentir; los niños son niños y la infancia hay que protegerla”.
Compromís: «Vuelta al pasado»
Por su parte, el portavoz de Compromís, Vicent Granel, ha denunciado que “esta decisión se toma sin ningún informe técnico, y con la única decisión unilateral de un regidor que solo quiere que se conozcan sus ideas, y esconder las otras”.
“Es lamentable que asistamos a estas decisiones, amparándose en una interpretación de una ley, cuando hablamos de libros infantiles, en el que se explican conceptos muy básicos al público infantil de casa”, ha explicado Granel, que observa como el regidor de la Censura de Vox “quiere eliminar cualquier posibilidad de libertad de elegir lo que se pueda leer en la biblioteca municipal”.
Por todo esto, Granel ha avanzado que “vamos a pedir un informe técnico a la biblioteca municipal que avale una decisión que pensamos que censura al público infantil de unos libros que solo hacen que informar, explicar, dar a conocer, y no atacan, ni muerden, ni nada parecido a lo que piensa el regidor de la Censura”.
Granel ha recordado que “en el plenario de julio ya advertimos que el nuevo regidor había ordenado no adquirir más libros de temática LGTBI, y esta es una prueba más del odio que despierta a una sociedad diversa que quiere apartar a un lado”.
Y si hablamos de leyes. La Ley de Infancia de la Generalitat Valenciana, destaca en los artículos 19, 38 y 44, que “las acciones educativas adoptarán una perspectiva inclusiva y de género, reconociendo la diversidad afectivo-sexual”, y que “los programas serán coeducativos y promoverán la igualdad de oportunidades y de género; el respeto y tolerancia, de forma que con ellos se favorezca la prevención de actitudes y situaciones violentas; el respecto a las diversas formas de relación afectivo-sexual; y la educación intercultural”.
Ya vivimos este caso hará unos meses en las revistas en valenciano, que continúan en la biblioteca, “al menos hasta 2024, cuando acaban las suscripciones”, y ahora el PP debe de expresar su opinión, no escudarse en ninguna ley, y decir que les parece las decisiones de su regidor de la Censura.
La Concejalía de Igualdad cuenta con el programa Maletas Coeducativas en los centros escolares, y preguntaremos si va a continuar o también va a censurarse. El Ayuntamiento de Burriana cuenta con un Plan de Igualdad, un Plan de Juventud, y con una moción aprobada por los derechos LGTBI aprobada por el PP, y con estas decisiones “volvemos al pasado”, aseguran en el comunicado de Compromís